
Por Rubén Gazapo Ramos
El Juzgado de lo Social de Vitoria (sala número 3) denegó la vigencia de las medidas cautelares a las que se aferraba el Saski Baskonia para que Mindaugas Timinskas jugara en la Liga ACB como comunitario.
El Juzgado argumentó que la medida cautelar anterior, se adoptó solo en relación con la licencia de la temporada 2000-01. Manifiestá además que el club debía abrir otro procedimiento para la temporada actual. Como resultado de este revés, el Baskonia no podrá alinear a Timinskas en su próximo partido contra el Caprabo Lleida.
El club ve esta decisión como una barrera y presentará un recurso con celeridad. El juez titular que emitió el auto favorable anterior, el pasado año, fue trasladado, y el fallo actual es emitido por un juez sustituto e interino.
Timinskas no pero Karnisovas sí
El mismo día, otro tribunal, el número 20 de lo Social de Barcelona, dictó una decisión opuesta en un caso similar. En este caso con el jugador Arturas Karisovas. También lituano.
El tribunal barcelonés dio plena validez a las providencias dictadas el año pasado. Permitiendo así la alineación del jugador del F.C. Barcelona, como jugador comunitario para la presente temporada.
Esta disparidad genera una «clara incongruencia» y una «discriminación» a favor del F.C. Barcelona. Al poder alinear a Karnisovas, mientras que Timinskas tendrá que ser descartado cada jornada. Cabe indicar que las dos plazas de jugadores extranjeros del Baskonia, las ocupan Elmer Bennett y Dejan Tomasevic en la Liga ACB.
El abogado de Saski Baskonia, Juanjo Seoane, explicó que el club recurrirá el auto porque considera que no tiene limitación temporal ni contractual. La cuestión de fondo es el «derecho del alero a no ser discriminado en el mercado laboral por su condición de ciudadano lituano».
Seoane defiende que el jugador es un «trabajador más». Mantener su derecho a jugar no debe ser renovado temporada a temporada, en contra de lo interpretado por el tribunal vitoriano. También advierte que la resolución del recurso no será inmediata y podría afectar la trayectoria deportiva del equipo.
La entidad del Buesa Arena ha denunciado la incongruencia y el distinto rasero que aplica el Consejo Superior de Deportes (CSD) para permitir la participación de ‘comunitarios B’ en otros deportes. Como ocurre en el fútbol o en el balonmano. Ahora también en la ACB, con fallos judiciales contradictorios.